sobota, 11 października 2008

Cuando llegó el botones, un joven muy educado

Cuando llegó el botones, un joven muy educado hombre negro que sonaba de su acento, como fue el de Caribe francés, pidió a los botones si él pensó que yo era sexy. Yo no podía saber si los botones se sonrojarse porque su piel era de un marrón muy oscuro, pero se veía incómodo como él respondió que sí.

Mi amante entonces le preguntó si le gustaría tener sexo conmigo, y que se le pagaron $ 200 si lo hizo. Los botones de inmediato de acuerdo - I'm seguro de que él sólo pensó en esto como una manera inusual para ganar una propina! Me sorprendió, y no era realmente seguro de que quería hacer esto. Yo pensaba que de alguna manera mi amante de más edad habría sido demasiado posesivo de haber pensado de hacerlo - que había mostrado algunos destellos de los celos, a veces, pero fue sólo más tarde que yo conectado lo que estaba haciendo en este momento para mi descripción anterior en la cena de data hombres jóvenes.

La desnudó rápidamente botones (salvo para dejar en sus calcetines, que me pareció ridículo - ¿por qué los hombres dejan sus calcetines en cuando tienen sexo - ¿Piensan que es equivalente en sexiness a las mujeres que usan medias o sus tacones altos?). Supongo que están esperando que diga que había un gran monstruosamente gallo negro, pero en realidad es normal de tamaño, aunque muy oscuro. Él no sabe si a kiss me, por lo que no, con torpeza y está por el lado de la cama.

Mi amante de más edad me dijo para empezar a chupar la polla de botones, y así lo hice. Después de un rato de esto, él me dijo que llegar a mis manos y rodillas en la cama y botones para la mierda a mí, sino para detener antes de que él llegó. El botones era provisional, por lo que nunca hasta el punto de que se caliente lo suficiente como para realmente disfrutar de ella. Sin embargo, el ritmo de ser follada al estilo perrito eventualmente lulled me conocen en los sentimientos, sobre todo porque su gran testículos colgantes bofetada que mi clítoris cada vez que empuje dentro de mí, y comenzó la detección de la tensión en mis muslos y el estómago señaló que viene un orgasmo.

Antes de que podía venir, mi amante le dijo al botones para tirar y se puso en mi trasero. Él dudó en primer lugar, no está seguro de si debería, pero con un firme "¡Hazlo!" de mi amante de más edad, comenzó a empujar su polla en mi culo. Yo no estaba lubricada a todos, y mi coño no había llegado realmente tan húmedo que su gallo se mancha suficiente para resbalar en, por lo que se quema.

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